El SC Braga ha caído por 6 a 4 contra el anfitrión BSC Lokomotiv en la final del Mundialito de Clubes 2021
Jueves, 28 de octubre de 2021. Llorenç Gómez cierra con una sonrisa el debut en su nueva etapa como entrenador. El torrense ha dado el salto oficial a los banquillos como miembro del staff del SC Braga en el Mundialito de Clubes 2021, celebrado esta misma semana en el CSKA Arena de Moscú. Una competición que se ha desarrollado a ritmo de coronavirus y que ha concentrado todos los encuentros en tan solo dos días. Unas circunstancias excepcionales y complicadas para los equipos, que apenas han podido conjuntar a sus jugadores antes de salir al terreno de juego a luchar por el título.
El objetivo de los portugueses no era otro que proclamarse campeones de la competición por tercera vez consecutiva, pero no ha podido ser. Ostentaban el título desde 2019 y de haber conseguido un nuevo oro se hubieran convertido en el club con más títulos en este campeonato.
(FOTO: SC Braga)
Pero el logro ha acabado siendo para el anfitrión BSC Lokomotiv, quien ha hecho historia después de superarlos en la final de este miércoles por un marcador de 6 a 4. A pesar de no hacerse con el título, la valoración del campeonato a nivel de resultados es más que positiva. En los cuartos de final han superado por 4 a 2 al Tokyo Verdy, mientras que en semifinales han derrotado al FK Dinamo Minsk por 2 a 6.
El entrenador-jugador portugués, Bruno Torres, muestra, ante todo, el orgullo que siente por su equipo. Asegura que “todos demostramos ser auténticos guerreros y nunca bajamos los brazos ante toda adversidad”.
Dadas las circunstancias complicadas surgidas a última hora, explica que “la intención del club era posponer la competición y celebrarla en otra fecha para poder mantener el formato, proteger la integridad física de los atletas, poder seguir haciendo un buen trabajo en la planificación y preparación de cada partido y para que todos los equipos compitieran en igualdad de condiciones”. “Sin embargo -lamenta- creo que fuimos el único equipo que demostró estas preocupaciones de una forma muy clara”.
A pesar de eso, añade que “decidimos colaborar y competir dando lo mejor de nosotros dentro y fuera del campo con la esperanza de que los otros agentes deportivos también tuvieran esa habilidad.
(FOTO: SC Braga)
Estamos orgullosos de la respuesta que hemos tenido, pero frustrados por la derrota en la final. La plata es valiosa y recibimos la medalla en el pecho con orgullo y respeto, pero queríamos y merecíamos el oro”. Sentencia que “sabemos perder pero no nos gusta perder, especialmente en estas circunstancias”.
(FOTO: SC Braga)
Llorenç Gómez se muestra más que satisfecho por la experiencia vivida. Reconoce sentirse “muy feliz por todo lo que he aportado al equipo, por las responsabilidades que he asumido y por la ilusión con la que he vivido cada partido… Se me erizaba la piel antes de cada encuentro…”.
Unas sensaciones que vive por primera vez fuera de los terrenos de juego y que, como a él le gusta decir, se suman a su mochila de vida.
Esta vez, de Moscú se lleva “mucho aprendizaje al lado de un gran club con grandes jugadores, compañeros y staff”. “No había mejor manera para empezar -añade- y estoy muy contento por esta oportunidad y por haber vivido todo lo vivido”.
Explica que “el cambio de planificación y del formato de competición ha dificultado el desarrollo del campeonato”, pero insiste en que “hay que adaptarse a la situación sanitaria actual y asumir la nueva realidad”.
Lamenta no haber podido volver a casa con el oro, sobre todo por la entidad portuguesa, que se ha quedado a las puertas de hacer historia.
En este sentido, reconoce que “la plata sabe a poco y que hubiera sido muy bonito ser partícipe de lograr la meta”.
Los títulos de Máximo Goleador y Mejor Jugador han sido para el ruso Nikonorov, mientras que el de Mejor Portero ha recaído en el brasileño Rafa Padilha, jugador del Braga.
(FOTO: BSWW)