El CD San Francisco arranca la temporada 2021. Lo hace con ambición y con el principal objetivo de consolidarse como una referencia del fútbol playa.
A nivel competitivo, la meta también es clara: ganar todas aquellas competiciones en las que participe. En este caso, la Liga Española, la Euro Winners Cup, la Copa y la Supercopa. La entidad se ha concentrado esta última semana en Mazarrón (Murcia) para preparar estos campeonatos. Y es que el talento individual está, pero falta pulir detalles y conjuntar el equipo.
Enzo10 ha hablado con el presidente de la entidad, Amedeo Spadaro, y con el técnico, Ramiro Amarelle, para analizar el inicio de una temporada muy prometedora.
AMEDEO SPADARO, presidente del CD San Francisco
Desde hace más de 40 años trabajáis en la formación del desarrollo humano y deportivo de niños y jóvenes a través del fútbol. Ahora decidís apostar con fuerza por el fútbol playa. ¿Existía un vacío en este ámbito?
Claramente aquí en Mallorca existía un gran vacío en el tema del beach soccer. Baleares es una tierra de verano, de playa, con mucha costa y con muchísimo niño y niña practicando fútbol, entonces este ha sido el motivo principal por el cual hemos apostado fuerte por este deporte.
No tenía sentido que en España entre todas las realidades del fútbol playa existentes no hubiera una realidad balear.

(FOTO: CD San Francisco)
¿Cómo gestionaréis la transición o la complementación de una modalidad a otra?
Entre fútbol y fútbol playa hay unas sinergias enormes. El fútbol playa no deja de ser fútbol, se juega sobre la arena y esto obviamente requiere la mejora enorme de toda una serie de gestos técnicos que aumentan la calidad del trato del balón por parte del jugador y de la jugadora. Aumenta enormemente una serie de capacidades condicionales como la fuerza explosiva, la propiocepción por jugar sobre un terreno imperfecto aumenta también por el tipo de juego la capacidad de concentración en las transiciones defensa-ataque… En definitiva, es mucho más lo que aporta el fútbol playa al fútbol que no al revés.
¿Cuál es vuestra metodología y filosofía de trabajo?
Nosotros intentamos aportar modelos formativos globales. Intentamos que el niño que se acerque al fútbol, que viene a jugar con nosotros, crezca desde un punto de vista atlético, técnico, táctico, y psicológico, y aumente su capacidad de análisis y de toma de decisiones. Cuanto más y más distintos sean los estímulos a los cuales se le somete, mejor será este proceso de aprendizaje y crecimiento.
¿Faltan proyectos como el vuestro en el mundo del beach soccer?
No lo sé. Te digo honestamente que no lo sé. El nuestro es un proyecto simple, modesto, un proyecto de fútbol profesional aplicado al fútbol playa, no inventamos nada nuevo. Nosotros aquí en el San Francisco hacemos fútbol semiprofesional a nivel juvenil, el División de Honor, sabemos cómo funcionan las dinámicas, sabemos cuáles son las características de un club serio, lo que tiene que ofrecer a los jugadores y al cuerpo técnico, y lo hemos aplicado al fútbol playa. Si hay otras realidades, lo desconozco. Espero que sí que las haya por el interés de todos los que hacemos fútbol playa.
Habéis decidido apostar por una gran leyenda del fútbol playa, Ramiro Amarelle. Defínenoslo.
¿Qué decir de Ramiro Amarelle? Ramiro Amarelle es el fútbol playa, no solo en España sino también a nivel mundial. Ha sido jugador, ha sido un gran talento. Ahora desde hace unos años entrena y obviamente su experiencia de vida y su manera de ser, su preparación, su obsesión por la perfección, lo han transformado en, si no el mejor, uno de los mejores entrenadores de fútbol playa existente en activo del mundo. Tenerlo con nosotros y que haya aceptado unirse al proyecto del San Francisco es un honor y nos obliga a nivel de club a estar a la altura, y lo vamos a intentar por todos los medios.
Háblanos un poco de la plantilla también.
Ramiro es la persona más indicada para gestionar una plantilla de altísimo nivel como la que hemos confeccionado. Empezando por Llorenç, que es un poco el buque insignia del fútbol playa en España, y pasando por Javi Torres, Pablo Pérez, Cristian Torres, Fran Mejías, Eliott Mounoud… puedo hacer todo el listado y se trata de una plantilla de primerísimo nivel. Básicamente son tres cuartos de la Selección Española, más el portero de la Selección Suiza, más Carlos Carballo, el capitán de Paraguay, Gaston Laduche, capitán de Uruguay… La plantilla es de muy alto nivel, es muy competitiva en ámbito nacional y en ámbito internacional.
¿Cuáles son vuestros objetivos a corto, medio y largo plazo?
Con una plantilla así y con un cuerpo técnico así obviamente los objetivos son los de intentar competir al más alto nivel contra los mejores equipos de España y de Europa para intentar ganar los títulos de las competiciones en las cuales participamos. Sabemos perfectamente que los rivales son igual o más buenos que nosotros y que en fútbol para ganar muchas veces hace falta una buena pizca de suerte. La experiencia a nivel de club no la tenemos, pero a nivel de jugadores y de cuerpo técnico sí, entonces queremos objetivos de excelencia inmediatos.
¿Esta temporada tiene que significar un antes y un después?
Esto tiene que servir fundamentalmente para asentar el fútbol playa en Mallorca, asentarlo todavía más en España y que sea un proyecto que dure de aquí a la eternidad, como la famosa película.

(FOTO: CD San Francisco)
RAMIRO AMARELLE, técnico del CD San Francisco
Antes que nada, enhorabuena por tu llegada al CD San Francisco. ¿Cómo recibiste la propuesta?
Hace ya tiempo que conozco a Amedeo, el presidente del club, y hemos tenido varias reuniones y conversaciones acerca del deporte y su situación en el mundo y en España en particular, claro. A partir de ahí, surge su interés por hacer algo más que un equipo para jugar un campeonato concreto. Ve ilusionante hacer un proyecto a medio plazo y cree que puede ser una buena oportunidad de expansión para su club de fútbol: un área específica de fútbol playa. Desde este pensamiento, va dando pasos adelante en el proyecto y yo creo que muchos de ellos están dirigidos a construir un equipo profesional de este deporte.
Nuestra comunicación ha sido bastante regular en el tiempo, y la oportunidad de colaborar surge cuando yo tengo disponibilidad en este mes y medio, después de terminar el clasificatorio de CONCACAF con Trinidad y Tobago. Me lo propone y realmente me parece una buena forma de dar apoyo a una idea de crecimiento: profesionalizar el deporte en nuestro país. Y aquí estamos.
Ya habías tenido la oportunidad de jugar durante muchos años y disfrutar de este deporte en Mallorca. Ahora te toca hacerlo desde el banquillo. ¿Cómo es el Ramiro Amarelle entrenador?
Yo creo que es una buena persona… o por lo menos intenta serlo. Siempre quise conseguirlo como jugador, así que creo que no he cambiado mucho en ese sentido más personal. (Lo que no se es si lo habré conseguido jejeje).
En lo profesional, me considero serio, riguroso, trabador y sobre todo con muchas ganas de seguir aprendiendo en todas las áreas que rodean esta profesión. Es cierto que llevo toda mi vida siendo entrenador, pues desde hace ya 25 años dirijo equipos de fútbol y estoy entrenando a diario en la playa, pero desde luego que he evolucionado mucho a todos los niveles porque me encanta reciclarme, me encanta aprender y sobre todo porque me encanta rodearme de gente buena en diferentes áreas. Creo que soy mucho mejor cada día que pasa, mucho más observador, comprensivo y con capacidad para gestionar los recursos que tengo a disposición.
Vienes de dirigir a las selecciones de China y de Trinidad y Tobago. ¿Piensas implantar el mismo estilo de juego o vas a adaptarte al nuevo grupo?
Como siempre que uno llega a un grupo, tiene que conocer los elementos de los que dispone para construir el mejor producto posible. Nuestro objetivo es ayudar al club y a los jugadores, por lo que pondremos todo de nuestra parte para que todos puedan desarrollar y potenciar al máximo sus capacidades. Desde ahí, veremos lo que somos capaces de construir juntos.
Conoces a la mayoría de los jugadores, has compartido vestuario con algunos de ellos… ¿Cómo ves la plantilla?
Es una plantilla que mezcla veteranía y juventud, con jugadores referentes y con otros que están en su fase de despegue. En mi opinión, es una mezcla fantástica porque creo que todos nos vamos a enriquecer con esta combinación. Ahora, debemos intentar crear los vínculos y relaciones necesarios para que todos se ayuden. Tenemos la mejor plantilla posible y estamos muy contentos con todos los jugadores.
¿Virtudes y defectos?
Somos un equipo nuevo, que tratará de conjuntar muchos jugadores nuevos y que lógicamente sufrirá este proceso, pero nos hace mucha ilusión y creo que lo convertiremos en una fortaleza: la ilusión y la pasión pueden ayudar mucho en el camino para conseguir los objetivos.
Tendremos muchos errores, individuales y colectivos, pero ojalá seamos capaces de minimizarlos y de ayudarnos para corregirlos.
¿Cómo ha sido la preparación para esta primera cita?
La competición es la que nos marcará nuestro lugar. Es cierto que hay muchos equipos con capacidades y buenos recursos a disposición y, sin duda, muy buenos jugadores, así que es un reto fantástico poder participar y competir con todos.
¿Cuáles son los objetivos que te planteas con el equipo para esta temporada?
Como no puede ser de otro modo, nuestra meta es ayudar a mejorar a todos los jugadores. Tenemos un concepto del proceso de entrenamiento y del proceso de enseñanza-aprendizaje bastante claro y somos conscientes de las limitaciones temporales, pero nos gustaría que nuestra convivencia e intercambio de informaciones y análisis durante las competiciones fuesen significativos para ellos. Eso sería un gran indicador de que hemos hecho un buen trabajo. Luego, si somos capaces de coordinarlos y conseguir que a nivel colectivo se ayuden a conseguir un buen rendimiento, ya sería fantástico pues nos acercaría mucho a poder ganar, que a fin de cuentas es lo que todos los equipos quieren.
¿Afrontas el cargo como un proyecto a largo plazo?
La vida me ha enseñado que los proyectos a largo plazo hay que vivirlos de manera diaria, como si el hoy fuese el último día. Por ello, nosotros pretendemos dar lo mejor de nosotros cada día durante el tiempo que estemos juntos. Desde luego, tener definidos un sentido y una dirección en tus actos te ayuda mucho a saber dónde quieres ir. Afortunadamente yo tengo muy claro cuáles son las metas en mi vida: quiero ser feliz, disfrutar de mi deporte, de mi profesión y quiero mirar atrás, dentro de muchos años, y sentirme orgulloso de haber dado lo mejor de mí mismo en todo lo que haya hecho, sea lo que sea.